01/10/2019 - 11:10 - Canales
Autor: Trade & Retail
La Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal) advirtió sobre la alta carga tributaria que recae sobre la producción de alimentos y bebidas, y la directa incidencia que esta situación tiene en el precio final de venta de esos productos.
La entidad, en base a los resultados de un informe elaborado por Nadin Argañaraz, director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), alertó que en 2018 “los costos tributarios contenidos en los precios fueron de un 38,78% en los alimentos y de 47,2% en las bebidas”, al sumar la totalidad de los impuestos y regímenes que deben costear las empresas, como Ingresos Brutos, tasas municipales, Ganancias, seguridad social e IVA, entre otros.
Esta carga es incluso superior en el caso de sector exportador de alimentos y bebidas, tras el restablecimiento de los Derechos de Exportación, cuya estructura de alícuotas sufrió recientemente modificaciones para alcanzar el equilibrio en el resultado primario nacional.
“Con estos datos, se puede inferir que el desarrollo de la industria de alimentos y bebidas en Argentina está condicionado por estos elevados costos fiscales, además de los logísticos, laborales no salariales, así como también por las trabas al comercio y al acceso al financiamiento, entre otros factores”, sostuvo la Copal.
En un comunicado de prensa, la entidad empresaria dijo que “esta alta carga tributaria es razón suficiente y reflejo de la menor recaudación efectiva fruto de la mayor morosidad y evasión tributaria, que afecta directamente a los que pagan lo que corresponde".
“La industria no puede afrontar más trabas ni costos, nuestra actividad ya está damnificada por la situación económica que atraviesa el país, que lleva a una utilización de sólo el 50% de la capacidad de producción instalada y los altos índices de inflación”, advirtió Daniel Funes de Rioja, presidente de la Copal.
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