22/10/2019 - 11:10 - Canales
Autor: Trade & Retail
A contramano de la corriente de postergación de inversiones que impuso la realidad económicosocial de Argentina, Gómez Pardo está muy cerca de abrir las puertas del innovador Centro Comercial Yerba Buena, un gigante con una superficie cubierta de aproximadamente 22.000 m2, separados en un supermercado con un salón de ventas de de 13000 m2, un mall de 5600 m2 y áreas de estacionamiento y servicios.
Las novedades en el salón de ventas
Inspirándose en las últimas tendencias observadas en los retails de Europa, en el emprendimiento se adaptaron los espacios de un salón de venta convencional al tipo mayorista. Así resultó un híbrido en donde se destacan la bodega tipo cava, una charcutería donde se exponen los mejores productos de la región, una excepcional panadería y, como novedad, un sector de exquisiteces con cookshow donde se podrá degustar platos preparados por chefs, realizados con los productos a la venta.
En el caso del sector de frío, la mayor parte proviene de Italia, elegida por su alta calidad y tecnología. También resulta notable la arquitectura de la línea de cajas, los selfcheck out tradicionales y el primer check out sin asistencia que se instala en la Argentina a modo de desarrollo.
Un mall vanguardista
Desde su lugar de Project Manager del Centro Comercial Gómez Pardo, el ingeniero José Mariño cuenta cómo se concibió el mall comercial. “Desde un inicio se pensó en un espacio concebido desde lo sensorial. Se destaca un amplio pasillo central con un elemento escultórico principal suspendido que dialoga con bancos de diseño y un entorno de bares, restaurantes y espacios de lectura, acompañados de sectores de conectividad y multimedio para actividades culturales", señala el titular de Consultora y Desarrollo SRL.
Y describe otras innovaciones: "Es de destacar la acústica de la cúpula central soportada por vigas perimetrales,sin intervención de elementos que corten la visual otorgando al lugar un espacio de 600 m2, que podrá utilizarse para exposiciones y eventos culturales”.
A la búsqueda de la sustentabilidad
El emprendimiento se localiza sobre la avenida Perón, ligada por un lado a la ciudad de Yerba Buena y por otro al área natural del Parque Sierra de San Javier y la Reserva de Horco Molle, que corresponden a la ecorregión de las Yungas. Ese enclave planteó el desafío de la generación de espacios para estacionamiento debido a la densidad de vehículos/hora que genera el nuevo centro. Una de las decisiones ante ellos fue anexar un estacionamiento subterráneo, generando un 30% más de superficie.
También sobresalen algunas soluciones que tomaron en cuenta aspectos ambientales. Por ejemplo, el 95% del agua utilizada en la construcción fue agua de lluvia recuperada sin provisión de agua de red. También se diseñó una reserva subterránea de agua de 1000 m3 proveniente del manejo de las precipitaciones abundantes típicas de la zona.
Para hacerlo un auténtico Green Building, el edificio cuenta con paredes verdes verticales anexas al salón de ventas. Son 500 m2 con elementos biofílicos que contribuyen a disminuir la temperatura por evapotranspiración. Este tratamiento también se observa en los muros exteriores (300 m2). Además hay paredes verdes en sectores del interior.
El paisaje del exterior se completa con un parque temático de 3500 m2 para esparcimiento público, con una laguna que propicia el asentamiento de aves autóctonas y un sector de canteros con flora especialmente elegida para generar mariposarios naturales.
El 40% de la energía que utiliza el edificio proviene de una granja solar, en cuya primera etapa se estima una cosecha de 320,7 MWh/año. También se distingue el sistema de aislación, basado en paneles de poliuretano en las paredes y el techo, que posibilitan un ahorro de energía en refrigeración estimada en un 60 %.